Respuesta TRU

Debido a la curiosidad de uno de nuestros lectores, me he visto en la obligación de responder porque soy la única Bate-girl, y además de dejar en claro a que se refirió mi querido Eichy cuando dijo que yo escueliaba en temas amorosos.
Escueleo sí, pero solo en el sentido de que doy cátedra, nada más. Ya está dicho que entre Baterías nunca pasa nada, ni conmigo ni con Eich.
En cuanto a ser la única Bate-girl, la respuesta es sencilla. Porque hasta ahora no ha aparecido otra chica que cumpla con el único y universal requisito: Ser calle pero elegante.
Esto implica:
a) Tener su calletano como para poder entender las bate-chats (o conversaciones de la batería)en las cuales hacemos uso de un léxico ya propio de un tercer giro del lenguaje, del cual aquí pongo unas cuantas palabras como muestra:
Flow = lo fino desplazándose de un lugar a otro
Emearse = ponerse emo, sentimental pero atorrante
Cangri = Lo fino deviniendo con calle
Lo Paris Texas = sinónimo de lo Justin
Escueliar = Atrasar de manera fina

b) Ser tan fina como el cabello de Hans Jacobo Mancini o por lo menos acercarse a ese grado de fineza

Por eso, cualquier chica que sienta que cumple con los requisitos puede acercarse a él para que pase, sobre todo, la prueba de finura.

Hasta entonces seguiré teniendo exclusivamente el título de Bate-girl

Ble!

1 comentarios:

Anónimo dijo...

Brillante etimlogía fulosófica, en la línea de las realizadas por Heidegger o en el Cratilo.
Solo dejame dar unos aportes persoales.
-Flow: Puro Devenir, Flujo Eterno de Deleuze en el que la realidad es solo un corte artificial, Uno Primordial, Volutad de Poder en la lectura heideggeriana de Nieztsche.
-Emearse: estado piscológico pasajero; se puede decir de un ser humano normal que se ha "emeado" pero eso no signfica que haya devenido en uno de esos seres rastreros llamados Emos. El emeo es temporal, un estado de la mente que no dura mucho, como el nous.
-Escueleo: con calle, pero elegante
-Choleo: escueleo pero jarcor, más bravo: con más calle que elegancia. Luego del tercer giro del leguaje, ya no decimos que alguien ha sido choleado por ser lorna. Ahora decimos que alguien cholea a otros, lornas o no, porque le da la gana, ya que el choledor es así de bravo, y pobre del que es choleado.
Cfr. la tía Monty, la maestra del choleo.