La True
Desde que quitaron Weeds de Film Zone muy poco hay que ver en televisión. Soy un fanático de las series de televisión, mea culpa. Pero el hecho de que sea un zombie de doble moral, o como le diría Aristóteles, el hecho de que cometa akrasia, no significa que no sea conciente de lo malas que son. Son malas, lo sé, pero las sigo viendo. Gossip Girl no calza las expectativas: son solo modelitos caminando por Central Park (digo esto en parte para generar algun tipo de respusta por parte de El Emo). The Wire nunca llegó; nunca logré encariñarme del todo con los personajes de Chuck; In treatment, al igual que The L Word o como Von Rommel, es pura pretención; Desperate Housewives ya desespera por lo predecible; Ugly Betty es tan empalagosa como una quesadilla con mucho guacamole. Como dije antes, no me estoy poniendo desde el pedestal del buen gusto a la hora de afirmar esto. Como el adicto al cigarrillo que siempre llama a ese puchito el último, yo he visto estas series por última vez demasiadas veces.
No me pasa esto con la nueva serie de VH1 Latino: Secret diary of a call girl. Me gusta esta serie, y no hay ninguna doble moral de por medio. La serie es descrita de la siguiente manera en el blog oficial de Belle de Jour: "The show (starring Billie Piper), based on the book, based on the blog, based on the life". Tantos niveles los encontramo solo en el Fedro de Platón. Hemos de creer pues que una prostituta ficha londinense, cuyo nombre de batalla es Belle, lleva un weblog de sus experiencias y pensamientos. Este es ya de por sí un dudoso punto de partida.
En todo caso no nos las vemos aquí con una cualquiera. Belle revela conocimientos y reflexiones propias de una señorita bien educada. O bien es una puta sui generis, o bien es una ficción creada por un conjunto de ingeniosos PhD's en Filosofía de Cambridge, o bien ya es hora de replantear nuestra idea de puta. Su solo nombre es una directa referencia a una cinta homónima de Buñuel, Belle de jour con Catherine Deneuve, y es una melancólica nota a la belleza pasajera.
No me pasa esto con la nueva serie de VH1 Latino: Secret diary of a call girl. Me gusta esta serie, y no hay ninguna doble moral de por medio. La serie es descrita de la siguiente manera en el blog oficial de Belle de Jour: "The show (starring Billie Piper), based on the book, based on the blog, based on the life". Tantos niveles los encontramo solo en el Fedro de Platón. Hemos de creer pues que una prostituta ficha londinense, cuyo nombre de batalla es Belle, lleva un weblog de sus experiencias y pensamientos. Este es ya de por sí un dudoso punto de partida.
En todo caso no nos las vemos aquí con una cualquiera. Belle revela conocimientos y reflexiones propias de una señorita bien educada. O bien es una puta sui generis, o bien es una ficción creada por un conjunto de ingeniosos PhD's en Filosofía de Cambridge, o bien ya es hora de replantear nuestra idea de puta. Su solo nombre es una directa referencia a una cinta homónima de Buñuel, Belle de jour con Catherine Deneuve, y es una melancólica nota a la belleza pasajera.
Paritendo del buen presupuesto hermenutico de que al final todo texto, incluyendo los históricos y autobiográficos son ficción, poco importa. Lo cierto es que el blog está ahí, bien escrito y con un personaje central que se siente como si fuese real. En el como si está la clave. Cierto es también que una editorial ha comprado los derechos del blog a la "autora" y publica sus hisotirias en su colección de Non fiction, y que los libros han llegado ahora a la TV. Un largo recorrido desde las calles hasta las pantallas de nuestro hogar.
Pero por qué me gusta esta serie. Billie Piper es hermosa, como lo es también su coprotagonista y mejor amigo en la serie, como lo son también muchos de los clientes, como lo es también la Londres ficticia,glamorosa y brillante, como lo es también el aire sofisticado que la serie pretende.
Pero por qué me gusta la serie. Porque toda esta ficción es adrede. La Londres del blog está sin duda embellecida por Belle. No sabemos si la "autora" es real, pero sí que sabemos que las personas somos maestras en darle brillo y sentido a las cosas que no lo tienen. La vida de una prostitua, como la de todo mortal, nunca es tan glamorosa ni tan excitante; pero al narrarla es que se abren todas estas posibilidades. La serie de TV, usando los clásicos recursos de todo mass media, ha logrado una irreal y sólida historia que divierte, atrapa, interesa y emociona.No solo eso. Hannah, la mujer que se convierte en Belle por las noches, no puede ser sino fascinante. Hija de nuestra época, no se toma ni un segundo en cuestionamientos religiosos o de moralina o de feminismos de panfleto. "¿Me creerías si te dijera que me gusta?", le pregunta a su mejor amigo cuando este le interroga por su profesión. Hananh es inteligente, es bella, es segura y trata de no tomarse la vida demasiado en serio. Como la Londres de su ficción, parece invencible; pero no lo es, y ella lo sabe también. En el como si está la clave. Ella disfruta de la libertad, pero intuimos durante cortos momentos que tiene la melancólica conciencia de que no lo es, que se va a acabar. Ha elegido concientemente una vida que luce como si fuese real. He ahí la ambivalencia y la belleza de este personaje. Belle de jour, después de todo, significa Belleza de una mañana, que se acaba cuando cae el sol.
Son ocho episodios, seis de los cuales me han parecido muy buenos, y el último será exhibido la próxima semana. Ya se ha confirmado una segunda y hasta una tercera temporada. Mientras que en Lipstick Jungle tres tías pitucas neoyorquinas pretenden escuelear en cuanto a sofisticación y tercera ola de feminismo, esta puta londinense tiene mucho más que enseñarles y enseñarnos sobre qué es SER TRUE.
Pero por qué me gusta esta serie. Billie Piper es hermosa, como lo es también su coprotagonista y mejor amigo en la serie, como lo son también muchos de los clientes, como lo es también la Londres ficticia,glamorosa y brillante, como lo es también el aire sofisticado que la serie pretende.
Pero por qué me gusta la serie. Porque toda esta ficción es adrede. La Londres del blog está sin duda embellecida por Belle. No sabemos si la "autora" es real, pero sí que sabemos que las personas somos maestras en darle brillo y sentido a las cosas que no lo tienen. La vida de una prostitua, como la de todo mortal, nunca es tan glamorosa ni tan excitante; pero al narrarla es que se abren todas estas posibilidades. La serie de TV, usando los clásicos recursos de todo mass media, ha logrado una irreal y sólida historia que divierte, atrapa, interesa y emociona.No solo eso. Hannah, la mujer que se convierte en Belle por las noches, no puede ser sino fascinante. Hija de nuestra época, no se toma ni un segundo en cuestionamientos religiosos o de moralina o de feminismos de panfleto. "¿Me creerías si te dijera que me gusta?", le pregunta a su mejor amigo cuando este le interroga por su profesión. Hananh es inteligente, es bella, es segura y trata de no tomarse la vida demasiado en serio. Como la Londres de su ficción, parece invencible; pero no lo es, y ella lo sabe también. En el como si está la clave. Ella disfruta de la libertad, pero intuimos durante cortos momentos que tiene la melancólica conciencia de que no lo es, que se va a acabar. Ha elegido concientemente una vida que luce como si fuese real. He ahí la ambivalencia y la belleza de este personaje. Belle de jour, después de todo, significa Belleza de una mañana, que se acaba cuando cae el sol.
Son ocho episodios, seis de los cuales me han parecido muy buenos, y el último será exhibido la próxima semana. Ya se ha confirmado una segunda y hasta una tercera temporada. Mientras que en Lipstick Jungle tres tías pitucas neoyorquinas pretenden escuelear en cuanto a sofisticación y tercera ola de feminismo, esta puta londinense tiene mucho más que enseñarles y enseñarnos sobre qué es SER TRUE.
3:33 p. m.
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